Todas las oficinas dependientes del Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación en Reino Unido convocaron una huelga con carácter indefinido el pasado 14 de marzo.

• Reivindicamos la equiparación inmediata de las retribuciones de todos los trabajadores con la misma categoría administrativa, independientemente de su antigüedad.

• Exigimos una subida salarial que subsane la descomunal pérdida de poder adquisitivo resultante de tantos años de congelación, equivalente al 27,5% de inflación acumulada en el período 2008 a 2021.

• Reclamamos que los empleados públicos contratados en Reino Unido puedan ejercer el derecho de opción y elegir cotizar al sistema de Seguridad Social español o británico.

El Gobierno no ha querido responder a las justas, lógicas y legítimas demandas de dicho colectivo, que desde hace varios meses ha puesto en conocimiento de la Administración, a través de múltiples escritos dirigidos tanto al Ministro de Asuntos Exteriores como a la Directora General del Servicio Exterior, la situación de extrema precariedad en la que se encuentran.

Los datos oficiales sobre inflación y costes de vida no han hecho más que empeorar en los últimos meses: a la conocida subida del pago de la seguridad social del 1,25%, anunciada en las páginas oficiales del gobierno británico, se ha sumado el aumento del índice de inflación, que ha alcanzado el 5,4% con respecto al 2021, y que de acuerdo con la previsión del Banco de Inglaterra superar el 7% a finales del año fiscal (primavera de 2022).