Son paradas de larga duración a quienes se les ha comunicado verbalmente que, a partir del 9 de diciembre, están despedidas

Solidaridad quiere mostrar su repulsa ante el despido de 130 mujeres, todas ellas mayores de 45 años, a quienes el Ministerio de la Seguridad Social, que dirige José Luis Escrivá Belmonte, y la empresa pública Tragsatec, han comunicado verbalmente que el próximo 9 de diciembre serán despedidas.

El Gobierno deja así a 130 familias en la calle y el teléfono del Ingreso Mínimo Vital sin atención. Para el portavoz de Solidaridad, se trata de un “doble despropósito”. Por un lado, explica, “un Gobierno que se dice feminista, pero al que no le tiembla el pulso para dejar en la calle a 130 mujeres”. «En realidad el Gobierno sólo es feminista para salir a manifestarse un día al año porque cuando llega la hora de defender a las mujeres, no están», ha criticado, y ha lamentado, además, que esto le ocurra a un colectivo de más de 45 años, «del que ni los sindicatos de clase ni el Gobierno se ha preocupado, pese a ser un colectivo de difícil reinserción».

Por otro lado, denuncia que se deje sin atención a las personas que llaman para interesarse pro el Ingreso Mínimo Vital, “muchas veces como último recurso para llenar su nevera”. Para Alonso, “es una muestra de que el IMV fue una medida propagandística y no se apoyo social”.

Este sindicato exige a la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, que medie por las 130 trabajadoras, para que no sean despedidas. “Sobran muchos asesores, no estas 130 trabajadoras”.